viernes, 30 de marzo de 2012

La excepción de Idaho

Hubo un tiempo en que los abertzales vascos depositaron grandes esperanzas en los Estados Unidos. La derrota de Hitler y Mussolini parecía presagiar que los aliados, con los Estados Unidos al frente, impulsarían el fin de la dictadura franquista. La guerra fría terminó con toda esperanza. Eisenhower nos dio la espalda. Desde entonces, la clase política americana apenas se ha acordado de nosotros.

Hay afortunadamente, excepciones. En 1972 la cámara legislativa de Idaho aprobó una declaración de condena del régimen franquista. En el 2002 se atrevió a apoyar el derecho de autodeterminación vasco, a pesar de las presiones de la diplomacia española. En el 2006 volvió a aprobar una resolución similar. Y como no podía ser de otra manera en este nuevo tiempo político, la cámara legislativa de Idaho acaba de alzar su voz para pedir a los Gobiernos español y francés que se comprometan en la búsqueda de una paz duradera. El veterano Pete Cenarrusa, referente político de la dinámica comunidad vasco-americana de Idaho, ha vuelto ser el principal impulsor.

En la introducción de la declaración aprobada se lee que el documento será remitido entre otros a Barack Obama. Uno no se imagina al presidente estadounidense leyendo con preocupación la moción aprobada en Idaho, pero podemos imaginar la incomodidad de la diplomacia española, que esta vez parece no haber tenido tiempo para reaccionar.

viernes, 16 de marzo de 2012

Matar o filtrar

Barack Obama ha prometido que investigarán hasta el final la masacre en la que un soldado estadounidense ha matado a 16 civiles afganos. No es que uno no le quiera creer, pero algunos precedentes nos hacen desconfiar de la justicia militar norteamericana.

Hoy, 16 de marzo, se cumplen precisamente 44 años desde la matanza de My Lai, en Vietnam, en la que soldados norteamericanos mataron a 500 civiles, entre ellos muchos niños y niñas. Solamente uno de los participantes fue juzgado y sentenciado. El subteniente William Calley fue inicialmente condenado a cadena perpetua, pero no llegó a pisar la cárcel: cumplió 3 años y medio de arresto domiciliario.

Hay más casos. El último, el del sargento Frank Wuterich, considerado el máximo responsable de la matanza de 15 civiles en Haditha, Irak, el 11 de junio del 2006. Hace pocos meses, el pasado enero, llegó a un acuerdo con la acusación: fue degradado y asumió una reducción de salario por tres meses. Es todo.

No siempre es así. El soldado Bradley Manning sí que ha pisado la cárcel. Fue detenido en mayo del 2010, estuvo en régimen de aislamiento total durante un año, y hoy sigue en prisión, a la espera de juicio. Se enfrenta a una petición de cadena perpetua. No está acusado de haber matado a nadie. Hizo algo muchísimo más grave: filtró documentos a Wikileaks.

jueves, 8 de marzo de 2012

Los cinco e Irán

Según el Tratado de No Proliferación Nuclear, casi todos los países del mundo tienen prohibido poseer armas nucleares, en nombre de la paz mundial. De acuerdo al mismo tratado, unos pocos países tienen derecho a poseer armas nucleares, supongo que también en nombre de la paz mundial. Los países privilegiados son los cinco miembros permanentes del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, que son precisamente las potencias que, junto con Alemania, iniciarán en breve negociaciones con Irán.

Hay días en que parece que Israel cuenta ya con el apoyo de los Estados Unidos para lanzar un ataque preventivo contra Irán. Y hay días en que parece que Obama ha llegado a la conclusión de que una agresión a Irán no le conviene electoralmente, como cuando ha pedido a sus rivales republicanos que dejen de tocar tambores de guerra y ha asegurado que va a agotar todas las vías diplomáticas.

Sea por las buenas o por las malas, a Irán le volverán a recordar el artículo segundo del Tratado de No Proliferación, que es el que prohíbe el desarrollo de tecnología nuclear con fines bélicos. Me temo que nadie se acordará del artículo sexto del mismo tratado, que compromete a los cinco países poseedores de misiles nucleares a negociar la reducción y liquidación de sus arsenales. Seguimos a la espera de que los garantes del Tratado cumplan algún día el Tratado.

viernes, 2 de marzo de 2012

Austeridad

En los Estados Unidos Europa es, ultimamente, una referencia constante. Para los candidatos de las primarias republicanas el modelo socioeconómico europeo es un fracaso absoluto al que les quiere arrastrar el socialista Barack Obama. Según el argumentario republicano, Europa está en crisis por la sencilla razón de que los estados gastan demasiado en coberturas sociales y tonterías parecidas. Se eliminan estos gastos, se bajan los impuestos, y asunto solucionado.

Afortunadamente, hay otras voces. El premio Nobel de Economía Paul Krugman lleva tiempo advirtiendo que las políticas de austeridad impulsadas por la Unión Europea no son ni mucho menos la solución, sino todo lo contrario: están agravando la crisis. Según Krugman, la inflación es en estos momentos la solución. La semana pasada el editorial del New York Times lo decía claramente: hasta que los líderes europeos abandonen la falsa idea de que la austeridad es el camino para aliviar la deuda, nada resolverá esta crisis. Y leo esta semana en el mismo diario que si el Banco Central Europeo hubiera prestado al gobierno griego dinero fresco en las mismas condiciones que a las entidades financieras ahora, la situación sería bien diferente.

Seguro que no existen recetas mágicas que arreglen este desaguisado económico, pero son bastante más convincentes los argumentos de quienes afirman que las políticas de austeridad tienen trampa.